Realizamos con los alumnos de año 7 una experiencia con una naranja de ombligo simulando la Tierra, introduciendo en ella una aguja de tejer cumpliendo la función del eje terrestre y la hicimos rotar.
Con lana o hilo realizamos mediciones: en posición perpendicular al eje desde la zona más abultada hasta la más chica (intersección naranja y aguja).
Marcamos las medidas y nombres de las circunsferencias: Ecuador, trópicos, círculos polares, meridiano de Greendwich, polos.
En la hoja de carpeta fuimos anotando las conclusiones a las que arribamos: la Tierra tiene forma de geoide (igual que la naranja de ombligo), la inclinación del eje, la llegada del sol a la zona polar, las medidas de las circunsferencias, entre otras.
Un grupo trabajó con una mandarina la que nos fue útil para diferenciarla con la naranja y arribar a otras conclusiones si la Tierra tuviera otra forma.